Cada gran ciudad tiene su hotel icónico y el de Madrid es, sin lugar a dudas, el Ritz. Y lo es desde el mismo año de su apertura en 1910, impulsada por el Rey Alfonso XIII ante la ausencia de alojamientos de lujo en la capital, que quedó de manifiesto en 1906 durante su boda con Victoria Eugenia de Battenberg. Por aquel entonces, el proyecto lo asumió César Ritz, un hotelero propietario de varios establecimientos en Europa. Él en persona encargó los planos del edificio a César Mewes, arquitecto del Ritz de París, quien contó con la ayuda de Luis Landecho y Lorenzo Gallego. La inauguración, el 2 de octubre de 1910 y presidida por los monarcas, fue todo un acontecimiento.

De sus mas de cien años de historia se cuentan hechos y anécdotas de sus ricos y famosos inquilinos que darían para un tratado de singulares maneras. Este hotel fue hospital durante la Guerra Civil y el hogar de quienes, tras la contienda, tuvieron que rehabilitar sus arrasadas viviendas. El Ritz puso de moda el célebre té de las cinco y vistió a sus botones de Balmain. Junto a su esposa Anita Delgado, por allí pasó el Maharaja de Kapurtala, quien daba las propinas con monedas de oro. O el Emperador de Etiopía, Haile Selassie, al que no se le podía dar la espalda, ni mirar a los ojos, ni por supuesto tocar, por lo que hubo verdaderos problemas con el servicio. Malcom Forbes en su día aparcó quince Harley Davidson en su puerta.

Durante mucho tiempo los negativos de gran parte de estas imágenes permanecieron guardados en cajas; gracias a los avances tecnológicos ha sido posible revelarlas con luminosidad, ya que fueron tomadas con luz ambiente ya que el autor de estas instantáneas no contaba con un flash.

La venta será realizada por la casa de subasta Omega este 24 de marzo.Cabe destacar que en 2011 la casa Christie’s subastó 46 de las imágenes en Nueva York, que fueron adquiridas por 362,000 dólares. Ya veremos cuál es el monto que alcanza este evento.

Anécdotas aparte, la mitomanía en torno a Ritz no solo se basa en quienes allí se hospedaron, sino también en sus objetos, su mobiliario y sus obras de arte, que, con motivo de la remodelación, ahora salen a subasta a cargo de la casa española Ansorena y de la francesa Piasa. Serán tres días de sesiones -7, 8 y 9 de mayo-, en los que se pujará por 4.000 piezas divididas en 1.500 lotes.

Coleccionistas en guardia

Candelabros, mesas, sillas y espejos, porcelanas y bronces, esculturas y piezas ornamentales desfilarán ante la vista de los presentes en la Fundación Carlos de Amberes, donde tendrá lugar su exposición unos días antes de la puja -del 4 al 6 de mayo-, lo que ha puesto los dientes largos a los coleccionistas.

El mobiliario del hotel -camas, mesas de comedor, consolas, espejos, apliques o lámparas- fue en su día encargado a la prestigiosa casa de ebanistas Lizarraga y Sobrinos. Las sábanas y mantelerías fueron realizadas por la firma irlandesa Robinson S. Cleaver. Los londinenses Goldsmith fueron los proveedores de 15.000 piezas en plata de cuberterías y servicios de mesa, así como 750 en oro puro. Desde Limoges (Francia), llegaron más de 200.000 piezas de porcelana. Los artículos de cuero fueron confeccionados por Loewe, mientras que las alfombras se hicieron a a medida por la Real Fábrica de Tapices: en total, un total de 10.000 m2 de alfombras. También, se saldrán piezas excepcionales, como un servicio de nácar y plata para el caviar. Todos los objetos se podrán visualizar en la web de www.ansorena.com y www.piasa.fr.

Por Patricia E. De los Monteros – El Ritz muestra sus tesoros para sacarlos a subasta – Este artículo se publicó originalmente en http://www.abc.es/estilo/gente/abci-ritz-muestra-tesoros-para-sacarlos-subasta-201804200204_noticia.html/p>