¿Alguna vez te has preguntado en dónde iniciaron las subastas como las conocemos el día de hoy?

Si bien las subastas se utilizaban anteriormente en Babilonia, no se pujaba por bienes, sino por personas. El sistema de venta basado en subastas que conocemos el día de hoy había sido relativamente raro hasta el siglo XVII, siglo de creación de Stockholms Auktionsverk en Estocolmo. Stockholms Auktionsverk es la casa de subastas activa más antigua del mundo. Fue fundada en 1674 por Baron Claes Ralamb, quien fuese gobernador de Estocolmo en ese momento.

Esta antigua casa de subastas fue propiedad de la Ciudad de Estocolmo hasta 1993, cuando empezó a ser operada por una empresa privada, cambio que favoreció al estatus de esta compañía, que es ahora la casa de subastas más importante en Suecia, conocida ahora por ser líder en ventas de arte, artesanías y antigüedades. El crecimiento de esta casa no se ha dado únicamente de manera local, donde cuentan con dos sucursales, sino también de manera nacional, contando con presencia en Gotemburgo y Malmö, y de manera mundial con representación en Londres, Paris, Niza, Nueva York, Bruselas, Ginebra, Helsinki y Oslo.

Al ser una casa tan antigua y con una gran representación en diferentes países, podemos deducir que la cartera de clientes de Stockhoms Auktionsverk ha sido conformada por personalidades como el rey Carlos XI, el rey Gustavo III, los escritores August Strindberg y Selma Lagerlöf, así como una gran red de compradores, vendedores y coleccionistas de todo el mundo.

Aparte de las numerosas subastas de arte moderno y diseño, arte contemporáneo que se llevan a cabo durante la primavera y el otoño, también se organizan subastas especiales de libros, mapas, manuscritos, vinos y licores especiales que pueden ser encontradas también en modalidad virtual.